La actividad estuvo acompañada por la Banda Instrumental de
Carabineros de la Prefectura Aysén
En la plazoleta ubicada en el sector Balsa de Puerto Aysén, existe un
monolito en recuerdo del Teniente de Carabineros, Hernán Merino
Correa, lugar donde vecinos del sector y funcionarios de dotación de la
Segunda Comisaria realizaron una ceremonia, ya que, este 6 de
noviembre de 2022 se cumplieron 57 años de su muerte, en la zona de
Laguna del Desierto, mientras realizaba acciones de defensa a la
soberanía nacional.
“Es tal la importancia de esta fecha que, el día de hoy, gracias a un
trabajo en conjunto que realizamos con los vecinos a través del
programa quiero mi barrio, se logró mejorar las condiciones que tenía
el parque junto al monumento. Por lo tanto, a través de una
restauración que le hicieron los mismos vecinos con nuestros
carabineros, ahora, tenemos un espacio más limpio, mucho más lindo
y más adecuado, para que los vecinos podamos compartir en este
lugar”, señaló el Comisario de Aysén, Mayor Patricio Bustos.
Hernán Merino Correa es el segundo de cuatro hermanos. Era hijo del
Capitán de Carabineros Carlos Merino Charpentier, quien estaba
destinado en Antofagasta cuando nació, el 17 de julio de 1936 y Ana
Correa de la Fuente. Luego de vivir en Valparaíso, a comienzos de la
década de 1940, la familia se radicó en Limache, donde Hernán pasó
gran parte de su infancia y adolescencia.
Muy aficionado al deporte, especialmente al fútbol donde destacó
como arquero. Desde siempre quiso postular a la Institución, pero
antes estudió Mecánica Industrial en la Universidad Técnica del Estado,
carrera que congeló para preparar los exámenes de ingreso a la
Escuela de Carabineros, a la que se incorporó en marzo de 1956 como
Aspirante a Oficial y egresó un año más tarde, con uno de los primeros
lugares de su promoción.
Como Subteniente, luego de algunas designaciones dentro de
Santiago, en 1960 fue destinado a Santa Bárbara, región del Biobío. En
esa época comienza a destacar por su generosidad y arrojo y lo
demuestra cuando un camión cayó al río Mininco; entre los
desaparecidos se encontraba una madre y su hijo. Merino inició la
búsqueda que se extendió hasta la desembocadura del río Biobío.
Aferrados a un tronco, en medio del cauce, vio a los sobrevivientes
rescató a la mujer y su hijo.
En febrero de 1962 fue trasladado a la Prefectura de Aysén, donde
realizó servicios en Coyhaique y Puerto Aysén. En esa época le
correspondió socorrer un avión de la Fuerza Aérea que se accidentó en
junio de 1963. En esta oportunidad organizó patrullas de rescate y fue
el primero en llegar al siniestro. Junto al piloto civil, Ernesto Hein,
lograron rescatar al único sobreviviente. En 1964 comenzó un nuevo
desafío en Chile Chico y al año siguiente se hizo cargo de la Tenencia
Cochrane, localidad de baja densidad poblacional ubicada a 345 km. al
sur de Coyhaique, cuenta parte de la historia, sobre Hernán Merino
Correa.